SOÑANDO QUE SUEÑO [Mi poema] Violeta Barrientos [Poeta sugerido]
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MI POEMA… de medio pelo |
Soñando que sueño Viviendo el presente, ¿Me quieres? te quiero Con mucha alegría |
Una muestra de sus poemas
MI POETA SUGERIDO: Violeta Barrientos
Pasión
Sentada en un trono
Llega la noche.
Descubre su pecho,
Dos amables pezones aguardan ser tocados.
Tibia, se posa con el cuerpo de espaldas,
Separa las piernas. Unos labios oscuros hablan
De un mundo de climas y lenguas hecho carne,
De un ser vivo que abre su misterio
Para ser contemplado por única vez.
Flores de loto
En el museo chino me muestran unos pequeños zapatos
de mujer, diríase de niña virgen. Los pies eran flores de loto,
Pequeños para no pesar sobre los hombros.
Los ojos cerrados –los de ella-
No deben observar a quien le llena el vientre.
Los pies pequeños no pueden ir lejos
Sin ser llevados por esclavos en una litera.
La niña ha tomado la forma de un recipiente,
Sus pies de hueso curvo se abren a un guerrero
O señor de cien siervas semejantes.
(de Erótica, inédito)
1
Gota de luna
es tu rostro creciente
luz cadenciosa
Serpiente
4
Dime Serpiente,
dónde se encuentra tu alma,
si entre tus ojos
o tu cabeza y cola.
Tal vez se alargue
in crescendo el latido
cuando me envuelvas
y tu lengua me toque.
6
Serpiente de agua
te deslizas de pluma y
seda tu fuerza
11
Suspendida en ti,
Serpiente,
descuelgas tu largo cuello.
Muda, sorda y ciega,
tu boca
aguarda la mordedura.
12
Tu único miembro arde, Serpiente,
en el ritual del otoño
desprendiendo hojas,
sacude y centellea
secretamente como un leño
del árbol en que duermes
hasta consumirse en sí mismo
deseando su ausencia.
Tu única voz, Serpiente,
modula un chirrido sin fin
que la deshace.
Oscura en ti,
reposas desnuda en tu fondo,
en tu materia larga,
en tu matriz.
(de El libro de la serpiente)
Fin de un viaje.
Las despedidas se hacen inevitables.
La nostalgia crece
aunque fuera por unas horas,
hasta que el presente ocupa la mente del viajero.
La realidad se divide ahora en dos:
en aquella parte que quedó atrás
y la que continua su camino.
Sin embargo, cada parte tiene una vida simultánea
invisible la una para la otra,
y elegimos sólo una,
en la ilusión de que nada más existe.
Así pasamos los días.
Sin darnos cuenta,
soltamos la cuerda de una mano a otra,
sobre el vacío.
(de fin de viaje)
Así abrimos el cuerpo
Al prójimo todos los días
Nuestros hígados han de ser devorados
Y nuestro corazón también
Hay que engordar ese cuerpo
La cadena alimenticia se extiende
(de Elixir)
Poema 5
Para hablar el mismo idioma
Hay que volver al cuerpo.
Pese a la apariencia,
El mismo que bebe y traga
Que duerme y respira.
Más allá de la ortografía
Y de la concordancia
Que nos divide ahora
Hermanos, volvamos a la patria
Del cuerpo
A nuestro cuerpo deudor
Sin nombre,
A nuestra fosa común.
(inédito)