A todos los amantes de la literatura en sus distintas formas o variantes...
EL PRIMER BESO [Mi poema]
Marta Pessarrodona [Poeta sugerido]
MI POEMA... de medio pelo |
Te quise en el verde pino Luego el segundo, el tercero, No pretendí hacerte daño, Pero para compensar |
MI POETA SUGERIDO: Marta Pessarrodona
Berlín: enero 1929
Vita interrumpió
sus versiones de Rilke.
El teléfono era Moabit 37-94,
y Friedrichistrasse la estación de llegada.
En la Funkturm, una tarde,
en escapada breve y solitaria,
Vita le dio a entender
la duración escasa de las pasiones humanas.
La conversación, bastante animada,
el pulso anímico de subido voltaje,
consiguieron silenciar
la letal marea humana.
(Las bombas futuras
no enturbiaron en absoluto la tarde.)
24 Brücken Allee, una dirección,
hoy compañera de los fantasmas
de antiguas embajadas:
la ciudad no había sido bombardeada.
Virginia regresó a Londres
al cabo de una semana, enferma.
Vita empezó a creer que
Leidenschaft era una palabra
de formación muy extraña.
De hecho, ninguna de las dos
presintió
la retórica del desastre.
Schöneberg
Como siempre, fue un affaire casual:
amistades de amistades, aquí, allá,
en el Norte, en el Sur…
Al principio no me gustas.
Quizá reconozca en ti mis defectos
(¡difícil encuentro entre escorpiones!)
y siempre quiero espejos
de la imagen más perfecta.
Prosigue la noche y el vino blanco,
de una región alemana
que me resulta totalmente extraña.
De repente (mientras «actúas»)
nos encontramos y nos sentimos.
«Treu» es un adjetivo
que acababa de aprender,
y me resulta muy útil para esta velada.
El vino y la noche prosiguen y nos separan.
Queda, sin embargo, mi fidelidad,
temporal y absoluta, a tu cuerpo,
a mi tacto.
l’amor a barcelona
EL NOM DE LES COSES
Les converses
han de ser brillants,
les trucades de telèfon,
un fax…
Hi ha, però,
una fatal incapacitat
per donar el nom de les coses.
Sentiments?
Seguim sense noms.
Un sopar,
un concert,
una trobada…
Sé que ho saps;
però tu, jo, tots,
seguim amb la basarda de les paraules.
EPÍTOM PER LES RONDES
Llisquen les emocions
com veloços centaures
per les noves rondes.
Ronda de Mar:
un far pot recordar-te
la poca solidesa
de les emocions urbanes.
Ronda de Dalt:
una torre s’aixeca dient
que tot t’ho donaran,
si el cor, el teu,
no es cansa.