A todos los amantes de la literatura en sus distintas formas o variantes...
EL MUNDO EN QUE VIVO NO ME GUSTA [Mi poema]
Carmen Cecilia Morales [Poeta sugerido]
MI POEMA... de medio pelo |
El mundo en que yo vivo no me gusta y obligan a ponerme una coraza Tratando de evitar los alacranes Que, amigo, el mundo no es lo que parece que sigas engañándote tú mismo se asoma a cada paso por tu lado, Los hombres son mezquinos y se venden |
MI POETA SUGERIDO: Carmen Cecilia Morales
PORQUE MI BOCA TIENE MEMORIA
Soy como las estrellas errantes
navegando en mares de nubes
y luego se lanzan
para entregar su fulgor
a la gratitud de las arenas.
Me agito entre vientos,
troto en alfombras invisibles
con mi vientre repleto de semillas.
Estoy llena de preguntas
y no entiendo las razones
del ángel que anuncia la hora de nacer
sin esperar unos años
para gorjear mi nombre en tu tiempo.
Sé que no es posible
suspender la secuencia de las horas,
detener el ardor de las estrellas
amontonándose entre mis piernas
donde tu cuerpo desnudo revienta
con la firmeza del árbol.
Es ahí donde te das cuenta
que absorbí la euforia de tus hojas
y me arrebatan las ganas de tenerte…
Porque mi boca tiene memoria,
porque mi boca no olvida
que el pájaro lunar me besó
antes de aletear entre heliconias,
antes de encaramarse
en el palo más alto del cielo
donde se otea la calma de las arañas,
ovillando la noche
y el relente del vino blanco
embriaga las hierbas
mientras gorjeas la madrugada
sobre la estampida de las sombras.
YA LOS BUITRES SE ALIMENTAN DE FLORES
El trote del viento
trae los rugidos del manantial
goteando en el mar
y fusionándose con licores
de frutas fermentadas.
El estiércol del mundo
asedia los costados
de una playa enardecida
que se resiste a devorar
lémures exiliados
de los rituales del hombre.
El pan dorado del crepúsculo
es el único manjar
de los lirios blancos
que retoñan
sobre los azulados pabellones.
Los buitres han ingerido
la sapiencia del búho
y olvidaron el sabor de la carroña,
maleza emergiendo
en el bosque de mandrágoras.
Ya los buitres
se alimentan de flores.
SE BUSCA UN POETA
Se busca un poeta.
Yo lo vi cruzar
un torrente de primavera
cuando el sol aparecía
en el cénit del horizonte.
Se busca un poeta
en el vuelo del halcón
que desciende
desde la cumbre de la montaña,
alucinado por la puesta de sol verde
que en un parpadeo desaparece.
Se busca un poeta
en la travesía fantástica
de la monarca,
en el aroma exquisito
de la flor de luna.
Se busca un poeta
en el ímpetu de las olas
que flagelan los acantilados
cuando las detienen,
en los hilos del arpa enamorada
que tiemblan
con el roce de los dedos.
Yo lo vi solitario,
envuelto en el denso velo de la niebla,
en el corazón del bosque
descubriendo pigmentos
entre raíces, bayas,
hojas y maderas.
Lo vi con un pincel en la mano
esperando
a la estrella dorada de Oriente.
De La danza de los dedos.
En el instante del crepúsculo
En el instante del crepúsculo
cuando tu luz ilumina
las franjas altas de mi éter
has sembrado en mis colinas
tus geranios rojos.
Sé que tienes grabada
la fragancia
de los jazmines
que nacieron
en mi huerta.
Has buscado con avidez
al pájaro que canta
en mi follaje,
tu memoria ha retenido
su melodía.
El olor de los juncos
que pueblan tu bosque
ha impregnado
este rincón de la tarde,
donde solo se escucha
te amo, te amo,
donde solo se escucha
el tum tum
de dos tambores escondidos.
Pelícano
Pelícano
Tu pecho abierto
de pelícano
me ofrece
el corazón,
la sangre
que vivifica
mi alma,
el agua de mar dulce
que bebo a diario.